Osteopatía
La Osteopatía ayuda a equilibrar el organismo, centrándose en su estructura y mejorando a partir de ésta el funcionamiento del cuerpo. Utiliza técnicas suaves, seguras y adaptadas a cada paciente y a sus necesidades teniendo en cuenta su edad, tipología y estado de salud.
La osteopatía también puede ayudarte:
NIÑOS Y BEBES.
La osteopatía ofrece en los niños la ventaja de poder actuar de manera preventiva y puede representar un gran éxito en el tratamiento de enfermedades infantiles; tanto las que tienen un origen genético o embrionario como las derivadas del proceso de gestación y sobre todo del parto.
El nacimiento es uno de los procesos vitales más estresantes. El bebé es sometido a numerosas presiones tales como la fuerza de las contracciones uterinas y la resistencia natural del canal de salida.
La cabeza del bebé absorbe con normalidad estas tensiones y presiones pero, en ocasiones, el cráneo no puede adaptarse bien y pueden aparecer pequeñas lesiones, sobre todo en partes donde se han utilizado fórceps o espátulas. La consecuencia puede ser que el bebé mantenga tensiones incómodas tanto en la cabeza como en el cuerpo.
A medida que el niño crece, estas tensiones mantenidas pueden afectar su desarrollo psicomotriz y también a sus defensas haciéndolo más vulnerable a las infecciones.
Con la osteopatía podemos ayudar a resolver estas tensiones y mejorar así la salud del bebé.
Indicaciones:
- Bebé llorón e irritable.
- Problemas de succión.
- Cólicos.
- Problemas para dormir.
- Infecciones: sinusitis, bronquitis, otitis, asma,
- Problemas digestivos.
EMBARAZADAS.
Durante el embarazo el cuerpo de la mujer está sometido a numerosos cambios. La naturaleza ha preparado el organismo para estos cambios. A veces, sin embargo, aparecen pequeños problemas de adaptación que pueden ocasionar molestias como ciatalgia, lumbalgia, ardor de estómago, etc
La osteopatía también ayuda a mantener una buena movilidad de los tejidos y los huesos de la pelvis (sacro, coxis, ilíacos). Esta buena movilidad permitirá un parto más fácil y lo más natural posible.
El tratamiento osteopático después del parto ayudará a reequilibrar la zona pélvica.
Indicaciones:
- Problemas esqueléticos: lumbalgias, ciatalgias, cervicalgia, dorsalgia.
- Problemas digestivos: estreñimiento, ardor de estómago, hemorroides, etc
- Problemas circulatorios: edemas en las extremidades, varices, etc …